
Últimamente escucho demasiados me apetece y no me apetece a mi alrededor, como si estos fueran además razón de peso en la elaboración de un argumento.
¿Sacas las basuras?
No me apetece. Me apetece salir al parque.
¿Vas a repasar sociales?
No me apetece. Me apetece más ver una película.
¿Está la cama hecha?
No me apetece hacerla.
Tengo la sensación de que cada vez se valora menos el esfuerzo, la responsabilidad y la voluntad como ingredientes de la verdadera libertad.
Querer y apetecer no es lo mismo.
Una persona puede querer hacer una cosa, al margen de lo que el cuerpo le esté pidiendo en ese momento. Para hacer lo que uno quiere es necesaria una voluntad fuerte y no dejarse llevar. Necesitamos conocer nuestros objetivos y responsabilizarnos por alcanzarlos al margen de lo que hoy nos apetezca. Necesitaremos esfuerzo y gran constancia para conseguir aquello que realmente queremos, cuando las cosas se vuelvan realmente difíciles.
A veces tengo la sensación de que cada vez pedimos menos a nuestros hijos y que estos se están adaptando de forma admirable a la ley del mínimo esfuerzo. Que flaco favor les estamos haciendo dándoles las cosas masticadas. Creo que nuestra sociedad necesita niños y niñas que se conviertan en hombres y mujeres responsables, valientes y de voluntad férrea, que sepan lo que es bueno para ellos y para los demás y luchen por conseguirlo al margen de lo que el cuerpo les pida en ese momento.
Necesitamos hombres y mujeres verdaderamente libres.
Creo que es interesante que pidamos a nuestros niños que piensen en sus objetivos a corto o medio plazo, que sepan cuales son los pasos que tienen que dar para conseguirlos y que sean conscientes de que el camino no siempre va a ser fácil y del esfuerzo que entonces necesitarán realizar, para alcanzar el reto propuesto.
Y en esas estamos…
Feliz día!!
Sara M.hace 5 años
¡Muy de acuerdo! Yo siempre les sigo a los míos que peimero la obligación, y luego la devoción; y conste que yo soy la primera que tengo que aplicármelo. Pero lo del no me apetece… No lo entiendo.
miren | de lunares y lunashace 5 años
¡hola! pues justo en eso está la mía de casi 3 años… «mamá, es que esto no me gusta..» que significa muchas veces que no le apetece.. y yo venga a insistir en que si no lo hace o no lo come, no podrá conseguir lo que ese día a esa hora «sí le gusta», es decir, le apetece…
la verdad que son minipeleas diarias, pero creo que son el tipo de batallas que no hay que dejar que ganen, o perderemos la guerra y crecerán sin valores.. ¡besos!
Sarahace 5 años
Yo creo que el primer paso es no preguntar, sino dar la orden: Haz la cama, repasa sociales, recoge la mesa. Cuando preguntamos les damos a entender que pueden elegir, que es lo mismo repasar sociales que ir al parque, cuando en realidad no lo es. Hay cosas que se pueden preguntar y cosas que no. Lo contrario genera confusión, nos quita autoridad (que no autoritarismo, ojo) y les da una idea falsa de las obligaciones de cada persona.